JUSTIFICACIÓN


El motivo para escribir lo que viene a continuación no es otro que luchar contra el olvido. No es la epopeya de un héroe de película americana, son más bien retales de la vida de la gente que normalmente no tienen cabida en las páginas de la historia con mayúsculas, sin embargo sospecho que tienen su importancia, importancia tapada por un falso brillar de esta vida que nos fabrican de plástico y oropel, esta vida en la que tenemos tiempo para todo menos para pensar. Esta vida en la que nos venden que es muy importante luchar contra el estrés o cómo diablos se diga y para eso, cuando no estás trabajando, hay que viajar, hay que estar ocupado como sea, pero no hay que cavilar, eso no.

Los viajes, a poder ser, organizados, de forma que pases por los países, pero sin  estar con las personas, la vida ordenada de forma que cuando terminas de trabajar tienes una película importantísima para ver, o un partido de fútbol en el que se juega todo, o una carrera ciclista, o el campeonato mundial de ..., si no te da por eso tienes que enterarte sin falta de la vida de tal princesa o de tal artista, de aquella modelo o del loquero o futbolista de turno ... El caso es llevarte del ramal a carreras.

Trabaja para pagar las hipotecas, compra esto y aquello y aquello y aquello otro, viaja, viaja que estas cansado y tienes que relajarte. Pero no se te vaya a ocurrir tumbarte bajo una higuera, que eso no tiene glamour, vete a la agencia de viajes y compra un tour por dónde te apetezca y si no puedes pagarlo ahora, no te preocupes, en diez mensualidades lo despachas. Lo gusto para venderte el siguiente “embarque”, para tenerte encadenado un año más. Y así hasta que revientes.

Pero pararte a ver de dónde de vienes, que es lo que de verdad necesitas, que es lo que de verdad te paga el trabajo de vivir, eso ni se te ocurra. No sea que te de por bajarte de la rueda ... y eso si que no. ¡Hasta ahí podíamos llegar!

O sea, que si tenéis mucho apuro, si necesitas relajaros, como dicen por ahí, pasar de lo que viene a continuación, no gastéis vuestro tiempo en balde, que esto ni tiene glamour, ni maldita falta que le hace. Si por lo contrario, no os importa perder un rato en recordar otras formas de vivir, que fueron las formas de vivir de los que peinamos canas, o si aún no las peinais, pero os gusta mirar un poco de dónde viene este país, de dónde salen esos padres, esos abuelos a los que no entendéis, a lo mejor en estas páginas encontráis alguna pista que os lleve a comprender algo que ahora os parece una historia de otro planeta.

Vosotros mismos.


© Milio´l del Nido
Memorias de Ciudad Naranco

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